Obra

recopilación de algunas obras del artista (pinturas, esculturas y dibujos) clasificadas por orden cronológico:

2014

Serie Caballos, Guerreros y Desastres:

Serie Memorias del Mar:

2013

Algunas obras de la serie "Caballos, Guerreros y Desastres":

2012

Algunas obras de la serie "Caballos, Guerreros y Desastres":

2011

Algunas obras de la serie "Caballos, Guerreros y Desastres":

2010

Algunas obras de la serie "Como un rio de sangre":

Algunas obras de la serie "Caballos, Guerreros y Desastres":

2009

Algunas obras de la serie "Caballos, Guerreros y Desastres":

Algunas obras de la serie "Memorias del mar":

2008

Algunas obras de la serie "Memorias del Mar":

Algunas obras de la serie "Caballos, Guerreros y Desastres":

2007

Algunas obras de la serie "Memorias del Mar":

Algunas obras de la serie "Caballos, Guerreros y Desastres":

2006

Algunas obras de la serie "Memorias del Mar" (algunas obras):

Obra de la serie "Rios de sangre":

Obra de la serie "Caballos, Guerreros y Desasastres":

2005

Algunas obras de la serie "Memorias del Mar":

Algunas obras de la serie "Caballos, Guerreros y Desastres":

Algunas obras de la serie "Elogio del Humo":

2004

Algunas obras de la serie "Memorias del Mar":

Obra de la serie "Elogio Del Humo":

2003

Algunas obras de la serie "Memorias del Mar":

2000 y 2001

Algunas obras de la serie "Como un rio de sangre":

1999

1996 y 1997

Exposición Vida y Sinrazón de los Fantasmas (algunas obras):

1994 y 1995

Exposición Serie África (Algunas obras):

1993

1991

Exposición Tiempo Diluvio

1990

Exposición Florencia, Italia

Exposición Galería la Oficina

1989

1979

1978

Cuando contemplamos una escultura de Germán Londoño vemos primero una sabia relación de formas y colores, como una armónica y bella adivinanza controlada por la geometría, pero el artista ha puesto un título y este abre caminos imprevistos a nuestra imaginación. Por tanto la solución de esta linaza puede ser poética, histórica(…)
Eduardo Ramírez Villamizar,Escultor

La pintura de Germán Lodnoño (Luminosa, alegre, divertida) es como una bocanada de aire fresco, como un descanso de puro goce estético después de los montones de sordidez y de feísmo a que nos ha sometido buena parte del arte colombiano contemporáneo. Este torbellino de feura lo hemos sufrido con un resignado estoicismo, pero da gusto que, después del tedio predecible y repetitivo de las instalaciones, después de las pedanterías conceptuales, después del reiterado sonsonete del arte comprometido en la denuncia, nos encontraremos –al fin– con una pintura radiante, con una feliz iluminación que no se avergüenza de deleitar el sentido para el que esta diseñado el arte pictórico: la vista.
Héctor Abad Faciolince, Escritor

Germán Londoño es un figurativo consciente de los valores abstractos que integran sus composiciones. A mí me parece que su posición es lógica y consecuente la medida en que su obra tiene un fundamento en el uso de símbolos. Sin ser de la misma naturaleza, el simbolismo de Londoño tiene un valioso antecedente en el Obregón de los cóndores andinos, las barracudas caribeñas y las flores amazónicas, pero dicho esto toca resaltar la diferencia que distingue: en sus lienzos, Londoño no representa regiones geográficas sino pasiones humanas.
Alvaro Medina, Curador

Germán Londoño busca hacer una pintura hedonista y sensualmente pictórica. Es figurativo porque quiere contar cosas y porque le encanta la idea de saber que pertenece a esa tradición inmensa de los pintores figurativos que han recorrido la figura humana para hacer arte.
Juan Antonio Roda, Artista

La pintura de Germán Londoño es ante todo una búsqueda personal basada en una amplía cultura: el cine, la literatura, la historia, participan de ella, al lado de múltiples referencias pictóricas, quizá no Siempre deliberadas. El resultado es una síntesis eminentemente plástica, en la que el control de las formas y colores, la utilización de texturas, el manejo del espacio se aúnan para lograr un resultado diverso y muy propio, libre de cualquier sujeción a escuelas o modelos preestablecidos.
Jesús Gaviria